"Me acosté, desconsolado, en el suelo y me puse a llorar. Ahora que estoy escribiendo [...] me doy cuenta de que [...] sin pasado ni porvenir [...] esa criatura que llora en un mundo desconocido, asiste sin saberlo, a su propio nacimiento. No se sabe nunca cuándo se nace: el parto es una simple convención. Muchos mueren sin haber nacido; otros nacen apenas, otros mal, como abortados. Algunos, por nacimientos sucesivos, van pasando de vida en vida, y si la muerte no viniese a interrumpirlos, serían capaces de agotar el ramillete de mundos posibles a fuerza de nacer una y otra vez, como si poseyesen una reserva inagotable de inocencia y de abandono. Entenado y todo, yo nacía sin saberlo y como el niño que sale, ensangrentado y atónito, de esa noche oscura que es el vientre de su madre, no podía hacer otra cosa que echarme a llorar."
martes, 24 de febrero de 2015
domingo, 18 de enero de 2015
"Ana Karenina", de León Tolstói
"Ya sabe que usted
significa para mí la vida; pero no puedo darle la tranquilidad, porque yo mismo no la tengo. Me
entrego a usted entero, le doy todo mi amor, eso sí... No puedo pensar por separado
en usted y en mí; a mis ojos los dos somos uno. De aquí en adelante, no veo tranquilidad
posible para usted ni para mí. Sólo posibilidades de desesperación y
desgracia... o de felicidad.
¡Y de qué felicidad! ¿No es posible esa felicidad?".
Vronsky
"Breathless" de Lurlene Mcdaniel
"Ciudades de papel", de John Green
"¿Sabes que por bastante tiempo en toda la historia de
la especie humana, el promedio de extensión de vida era menos de treinta años?
Puedes contar diez años o así de edad adulta ¿cierto? No había planeamiento
para el retiro. No había planeamiento para una carrera. No había planeamiento.
No había tiempo para planear. No había tiempo para un futuro. Pero entonces la
vida extendida empieza a volverse más larga, y la gente empieza a tener más
futuro, y entonces ellos pasan más tiempo pensando en este. Acerca del futuro.
Y ahora la vida se ha convertido en el futuro, cada momento de tu vida es vivir
para el futuro, vas a la secundaria para poder ir a la preparatoria y así poder
ir a la Universidad, entonces puedes conseguir un trabajo, así puedes tener una
linda casa, entonces puedes darte el lujo de enviar a tus hijos a la
Universidad..."
sábado, 17 de enero de 2015
"Bajo la misma estrella", de John Green
- … Hay siete billones de personas vivas, y cerca de
noventa y ocho billones de personas muertas.
- Oh. – Dije. – Había pensado que tal vez desde que el
crecimiento de la población había sido tan rápido, había más personas vivas que
todas las muertas acumuladas. –
- Hay cerca de catorce personas muertas por cada persona
viva. –… - Me estaba preguntando si todos podemos ser recordados. Como, si nos
organizamos, y asignamos un cierto numero de cadáveres para cada persona viva
¿Seriamos suficientes para recordar a todas las personas muertas? –
- ¿Y lo somos?
- Seguro. Cualquiera puede nombrar a catorce personas
muertas. Pero somos dolientes desorganizados, así que un montón de personas
termina recordando a Shakespeare y nadie termina reacordando a la persona que
escribió Soneto Cincuenta y Cinco.-"
"Frankenstein o el moderno Prometeo" de Mary Shelley
"Si nuestros instintos se limitaran al hambre, la sed y el deseo, seríamos casi libres. Pero nos conmueve cada viento que sopla, cada palabra al azar, cada imagen que esa misma palabra nos evoca.
Descansamos; una pesadilla puede envenenar nuestro sueño. Despertamos; un pensamiento errante nos empaña el día. Sentimos, concebimos o razonamos, reímos o lloramos. Abrazamos una tristeza querida o desechamos nuestra pena; Todo es igual; pues ya sea alegría o dolor, el sendero por el que se alejará está abierto. El ayer del hombre no será jamás igual a su mañana. ¡Nada es duradero salvo la mutabilidad!"
"La verdad sobre el caso Harry Quebert", de Joël Dicker
"Intenta usted hablarme de amor, Marcus, pero el amor es
complicado. El amor es algo muy complicado. Es a la vez la cosa más
extraordinaria y la peor que puede pasar. Un día lo descubrirá. El amor puede
hacer mucho daño. Así que no debe tener usted miedo de caer, y sobre todo de enamorarse,
porque el amor también es muy hermoso, pero, como todo lo que es hermoso,
deslumbra y daña los ojos. Por esa razón a menudo se llora después."
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